Eterno

Eterno despliega en el Teatro Calderón el universo pictórico de Pablo Picasso a través de la danza. Un espectáculo que desafía toda norma para deconstruir el proceso creativo del artista malagueño y recuperar su iconografía y su pasión. 

El espectáculo se divide en dos actos, compuesto por dos piezas coreográficas, que muestran la estética y los rasgos más característicos del universo del pintor. 

El primer acto de Eterno es una suite llena de luz, pasión y fuerza. Doce bailarines recorren diferentes palos del flamenco, con música interpretada en vivo por siete músicos. El arraigo y la actualidad del flamenco se presentan en una genuina estética parisina de principios de 1900, telón de fondo de una pieza que retrata la vida y el círculo de amistades, en los que el joven Picasso de 19 años, recién llegado a Francia, desarrolla su talento. La banda sonora de este primer acto, llamado “Suite Picasso”, es obra del guitarrista y compositor Manuel Urbina. 

La segunda parte, 'Eterno', investiga en originales formas y conceptos, estético y coreográficos, de carácter contemporáneo. Se zambulle en la mente del pintor para que el espectador pueda 'ver' a través de los ojos del propio artista su particular visión del mundo. Este segundo acto cuenta con una composición original sinfónica compuesta por el compositor Lucas Vidal.